21 de mayo de 2008

Esta imagen ha ocurrido hoy, llegando a casa. Y esta música también. Los ojos como platos, mirando al infinito, estando en cualquier parte menos en el coche, viajando lejos, las ventanas cerradas y una pompa de cristal ajena al mundo exterior rodando hacia el punto de fuga.. Las nubes oscurecían el techo anaranjado poco a poco, y las gaviotas bailaban sobre las montañas su danza del fin del día.. Miraba a las gaviotas, y miraba a los coches y a los viandantes... Unas libres, los otros de camino a sus cubículos para refugiarse de las tinieblas.. Y a todo esto mi pompa de cristal iba sobrevolando a media altura, las farolas recién encendidas haciéndose cada vez mas grandes a uno y otro lado, luces extrañas desfilando borrosas a mi izquierda, árboles de hojas color pistacho con sus ramas acogiendo la escena, todo ocurriendo en el más absoluto silencio, como en una película a cámara lenta, como en un sueño, tan solo deslizándose esta música entre mi cuerpo que he dejado de sentir.. Y las gaviotas flotando de un lado a otro, como si estuvieran colgadas con hilos invisibles, hilos que me mueven a mí también y me transportan a alguna parte, no sé adónde, tan solo sigo flotando y me dejo llevar...

(Música PLAY)